El hábito no hace al monje, pero a veces engaña.
Lo debe saber muy bien Hugo Aguilar Ortiz, futuro presidente del Poder Judicial de la Nación, cuando dice que un ministro de la Corte vale por lo que sabe y por cómo actúa, no por la ropa que lleva puepsta, y tiene razón.
No nos quita el sueño, pero disertamos en su postura de que no es populismo. Claro que lo es. Los dos presidente con mayor índice de populismo, Luis Echeverría y Andrés Manuel López Obrador usaban guayabera, para que el pueblo pensará que eran como ellos.
Claro, lo que la gente no sabe es que hay vestimentas muy autóctonas, pero carísimas. Una guayabera de de buena tela puede costar hasta 10 mil pesos. Un vestido como el que le emos a a lgunas políticas, vale más de 20 mil pesos, porque son hechos a mano, y, en honor a la verdad, son toda una obra de arte de nuestros artesanos.
Pero el punto central no es ese. Que se vista como quiera, y si cree que ir en ropa interior a la Corte es adecuado, que lo haga. Total, el aplicará las leyes a su arbitrio.
EL hábito no hace al monje, pero le da identidad, y es importante. Hace unos días, el senador Alex Padilla fue obligado a hincarse y acostarse bocabajo mientras policías del FBI lo esposaban, cuando intentó cuestionar a Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional de Donald Trump. Es que no vestía como senador, se justificaron los agentes.
Si leyera historia de nuestros pueblos prehispánicos -nótese, pueblos, no pueblo- Aguilar Ortiz se daría cuenta que era precisamente la vestimenta la que los hacía distinguirse del resto de los comunes, pero no como una estrategia de excepción, como una manera de que los reconocieran y acudieran a ellos.
Lo que me preocupa es que en su actitud de ser incluyente el futuro ministro presidente será todo lo contrario. México es sólo cultura mixteca, de donde él proviene.
Si privilegia a esta cultura a través de su vestimenta, ¿Dónde deja a los mayas, a los zapotecas, a los olmecas, a los náhuatl, a los chichimecas? Y a los que se me olvidan.
México es una diversidad de cultura que no podemos englobar a todos bajo una guayabera, y decir que eso es ser mexicano.
Debería venir al norte, donde usamos sombrero y botas, porque nuestra cultura prehispánica no dejó huella, dado que nuestros ancestros eran libres, e iban de aquí para allá tras la cacería.
En fin, que use lo que quiera, se vista como quiera, pero no diga que eso es México. Eso es mixteco y se respeta. Aunque esas actitudes son más guardar formas que fondos, y es peligroso en un Poder Judicial donde los encargados deben tener un amplio criterio para aplicar justicia, no leyes. Es decir, fondo, no formas.
Ya veremos que sigue. Seguramente una propuesta para vestir a nuestro Glorioso Ejército Nacional con el traje de los Caballeros Águilas de los Aztecas.
Francisco Zúñiga Esquivel es un periodista que se ha desempeñado en medios impresos y electrónicos. Catedrático en la materia de Periodismo en la Universidad Autónoma de Nuevo León, es además Presidente de la Asociación de Periodistas de Nuevo León, José Alvarado Santos
Como escritor tiene el libro Crónicas de la Nada, Andanzas por la Vida
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