Ningún personaje histórico tiene la riqueza anecdótica de Pancho Villa, quien realmente se llamaba José Doroteo Arango Arámbula, y nació un 5 de junio de 1878 en San Juan del Río, Durango.
Destacó como uno de los principales jefes de la Revolución Mexicana, y aunque de General de la División del Norte pasó a ser bandido, y por tanto fugitivo para el Gobierno, nunca pudieron capturarlo. Fue perseguido por el Ejército Mexicano y por el Norteamericano, dado que atacó la población de Columbus, Nuevo México, en lo que ha sido la única incursión extranjera en territorio continental de los Estados Unidos.
Se decía que lo mismo mostraba una ternura extrema que la más dura crueldad. Transformó las campañas militares, al crear un hospital ambulante en los ferrocarriles en que transportaba a sus tropas, a quienes pagaba un peso diario por pertenecer a su ejército. En vez de repartir las haciendas, las incautó y las puso a trabajar para solventar los gastos de la Revolución.
Su gran triunfo militar fue la Toma de Zacatecas, en un tiempo récord, la que fue la derrota del régimen dictatorial de Victoriano Huerta. Durante la revolución fue conocido como El Centauro del Norte.
En México, Villa es considerado generalmente como un héroe de la Revolución mexicana que se atrevió a enfrentarse a los Estados Unidos. El gobierno Mexicano declaró el año 2023 como el Año de Pancho Villa. Comandante de la División del Norte, fue caudillo en el estado norteño de Chihuahua, el cual, dado su tamaño, riqueza mineral y también la proximidad a los Estados Unidos de América, le proporcionó cuantiosos recursos.
Villa fue gobernador provisional de Chihuahua entre 1913 y 1914. El dominio de Villa al norte de México terminó en 1915, a través de una serie de derrotas que sufrió en León, Guanajuato batallas reportadas desde Celaya y Agua Prieta (Sonora) a manos de los generales Benjamin Hill, Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles respectivamente.
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